¿Qué llevo en mi maleta? ¿Cargas con secretos familiares?
Su primera inversión fue la compra de una maleta. Entre todas las posibilidades, eligió la que tenía un tamaño mayor, recordando lo que su tío le decía: “Caballo grande, ande o no ande”.
El chamán dio su punto de vista: “Las maletas sirven para viajar, aunque también para huir de una situación que consideramos insoportable. Pero cargar con una pesada maleta representa la existencia de un enorme secreto del que no nos podemos liberar”.
-¡Ahora comprendo! dijo el joven- He arrastrado por medio mundo una gran maleta medio vacía que no cabía en los ascensores, que daba problemas para subir a los autobuses y limitaba mi movilidad. Trataba de escapar cargando con un peso que ni tan siquiera era mío, formaba parte de una absurda idea inculcada por mi familia.
¡No cargues con secretos familiares! Viaja ligero de equipaje. En tu maleta, sólo lo imprescindible, aquello que salvarías en un naufragio.
Inscripción en su maleta: “Para el viaje, quita la mitad de la ropa que pensabas llevarte y dobla el dinero que tenías presupuestado”.
Fuente: planosinfin.com |