Jamás sueltes tus sueños.
Aunque no tengas certezas de que se concreten, la vida misma consiste en luchar por ellos.
Tener un motor que se encienda cada mañana por un objetivo que alcanzar es suficiente motivación para comenzar el día.
Podrán haber muchos vientos en contra, pero tu fuerza interior podrá contra todos ellos si no la dejas de alimentar en cada mañana y a pesar de las caídas.
Fuente: Ps. Patricia Cabrera Sena