Eres tan grande como tu voluntad de aprender y colocarte en situaciones que prueben que no eres la misma persona de ayer. Para ser grande tienes que ser más grande que tus miedos.

Ten certeza de que tienes la fuerza para lidiar con lo que se presenta, sino no se encontraría en tu camino, sería "problema" de otro.

Cuando el reto se presenta, es indicador de que estás listo para crecer, pero si rechazas la oferta que te lleva a tu grandeza por quedarte en la zona cómoda, atrasas tu evolución.

Claro que ante estas situaciones, las dudas y el miedo se hacen presentes, pero recuerda que sientes la emoción, no eres la emoción.

Cuando has estado paralizado mucho tiempo y ya duele, sabes que es hora de un cambio y el reto presenta el trampolín ideal.

Ten certeza de que tienes poder suficiente como para transformar el miedo en impulso y actualizarte.

Fuente: Mia Astral