Para aquellos que han sufrido este tipo de críticas o reclamos, recuerden la razón por la que su trabajo vale el costo que tiene.
Para muchos es muy sencillo no recordar que ciertas personas han dedicado años sacrificados de sus vidas para prepararse en una formación y servicio.
Sea cual sea tu preparación, tu título, y tu esfuerzo, si otros lo olvidan fácilmente, tú jamás lo hagas. Vales demasiado en la ayuda que brindas a otros, sea el servicio que sea el que atiendes.
Ojalá todos los profesionales pudiésemos trabajar en forma totalmente gratuita o accesible a toda la comunidad, pero al igual que todos los trabajadores del planeta, trabajamos para cubrir gastos, para vivir, con el agregado de que para llegar a ese puesto laboral tuvimos que pasar largos años de duros sacrificios, desafíos, nervios, agotamientos físicos y estrés emocional.
Así como muchos abandonaron la batalla a mitad del camino, otros para llegar a la meta tuvimos que pasar por durísimas pruebas de perseverancia y dedicación constante. Por eso es que el tiempo de tu trabajo vale tanto.
Es la misma sociedad la que para poner a cargo a alguien en ese puesto de trabajo, le exige una preparación, y el que quiera ocupar ese lugar tendrá que esforzarse mucho más que otros. La misma sociedad que a veces critica los costos, es la que coloca el valor a ese puesto de trabajo y nos dice a las personas: ¿quieres ese cargo? ¡pues esfuérzate para ganarlo! y ahí está el resultado final del costo de un servicio.
Fuente: Ps. Patricia Cabrera Sena |