La técnica de constelaciones familiares define que los problemas se pueden transmitir de generación en generación. Una constelación reúne a un grupo de personas que no son familia para aclarar un tema específico de su vida. Con el Tarot se puede realizar un trabajo similar, grupal o individual.

La Tirada de la Rueda

Este método es grupal, la persona que quiere resolver un conflicto se sitúa en medio del círculo. Los arcanos mayores están en círculo alrededor. La consultante cierra los ojos y, moviéndose alrededor, toma una carta, y con los ojos cerrados habla con la carta como si fuera su problema o la situación en sí. Tiene que hacerle preguntas y pueden intervenir otras personas que representen una carta. Al final del proceso las personas abren los ojos, contemplan las cartas y se dan cuenta que lo que dijeron era lo que la carta señalaba.

Ejemplo breve

Consultante preguntó por qué se había quedado sin trabajo y sin casa. Había tenido que volver a la casa de sus padres. Entró al círculo, giro y escogió una carta que la representara a ella. Sin saberlo escogió El Colgado.

-¿Cómo te sientes? -le pregunté.

-Me siento atada –dijo- no puedo moverme.

Me pregunto por qué le están sucediendo tantas cosas a la vez y porque se ha quedado sin trabajo.

-Estoy harta de esta situación. No me puedo mover.

Pedí que entrase al círculo alguna persona para hacer el papel del problema. Sale una voluntaria. Se repite la situación y escoge, sin saberlo, la carta del El Diablo. Se sitúa a espaldas de la consultante. La voluntaria dice: ¿Quieres resolver tus problemas? Y se situa frente a frente.

La consultante le dice: ¿Por qué me tienes atrapada? ¿Por qué me falta el trabajo y el dinero? ¿Por qué rompes todas mis relaciones amorosas?

-Yo soy tus proyecciones -respondió la voluntaria- Tú me has creado con tus miedos y tu desconfianza. Una y otra vez has sido celosa. Lo has controlado todo en lugar de amarte y confiar en los que te rodean. Soy tu orgullo. Siempre pierdes el trabajo porque quieres ser superior a los demás y terminas enfadándote. Tienes que aceptar que el amor a ti misma es primero, pero tú no amas, tú atas, y esa soy yo, tu atadura. Quiero que te liberes de tus resistencias y yo me disolveré.

-Pero, ¿por qué mis padres me odian y no confían en mí? -pregunta consultante.

Pido a dos voluntarios que hagan de sus padres, cada uno con un arcano. Sale el padre con El Ermitaño, sin saberlo, y la madre con La Luna, de igual forma.

-Papá, ¿por qué me odiaste siempre?

-Yo jamás te odie. Tuve muchas crisis en tu infancia: Me quedé sin trabajo, mi padre murió, pase muchas horas trabajando y regresaba a casa cansado. Tú siempre me reprochaste que te había abandonado, pero siempre te ame. Perdóname hija. (Se abrazan).

-Y la madre, ¿qué tiene que decir? –pregunté. Ella lleva La Luna:

-Estoy enfadada. Es muy irresponsable y siempre sale de noche. Llega tarde al trabajo y por eso siempre lo pierde. Y con las parejas es igual de irresponsable.

-Mamá, yo no quiero que controles mi vida.

-Es la consecuencia de tu falta de responsabilidad. Si vemos que afrontas tus problemas te daremos la libertad que necesitas.

-Sí, acepto y quiero liberarme. Perdóname.

Los 3 se funden en un abrazo.

Fuente: Fiorella Torres en Lecturas de Tarot Evolutivo