 En teoría, todos queremos avanzar en nuestras vidas, pero en realidad, pocas personas hacen lo que realmente es necesario para ello.A menudo me encuentro con personas que dicen querer ser ayudadas, pero a la hora de la verdad, cuando toca abrir los ojos a su propia realidad, no quieren verla.Entonces aplico la Ley de la No Intervención, como dice la frase "cuando el alumno está preparado, aparece el maestro". Si intentamos ayudar a una persona que no quiere ser ayudada, esa persona lo verá como una imposición, en cambio, si ayudamos a una persona que REALMENTE quiere ser ayudada, lo tomará como un regalo.Cuando queremos trabajar en nosotros mismos para sanar nuestras vidas y mejorarlas, es comparable a un jardín con un árbol nocivo. Puedes podar las ramas, cortar las situaciones que no te gustan en tu vida... pero éstas vuelven a crecer. Puedes volverte un experto en podar ramas y pasarte el resto de tu vida podándolas, pero si realmente quieres sanar tu vida, tienes que eliminar el árbol de raíz para que el resto del jardín crezca sano, y ésto requiere profundizar y ahondar mucho en uno mismo. A menudo nos encontramos con cosas que nos duelen, que no queremos ver, pero si seguimos podando las ramas nunca sanaremos la raíz del asunto, y por lo tanto, nuestras vidas. Además, mientras nos entretenemos en podar esas ramas, gastamos tiempo y energía que podríamos emplear en mejorar el resto del jardín. ¿Acaso no sería mejor arrancar el árbol de raíz?Todos queremos mejorar nuestras vidas, pero hay que estar realmente dispuestos a mirar en nuestro interior y enfrentarnos con lo que no queremos ver.Y tú, ¿estás dispuesto a entrar dentro de ti mismo o prefieres seguir podando ramas?Eva - www.ZonaPositiva.tk |
