Un síntoma es todo aquello que hace que no vivas una vida plena y feliz

Cuando tenemos un síntoma tenemos que buscar el origen del mismo, comprenderlo y sanarlo, y los cambios llegan solos.

Cuando vemos en nuestra vida, desde que nacimos hasta que nos damos cuenta que tenemos un síntoma, y como éste influye de manera negativa para alcanzar nuestros sueños y ser feliz, podemos encontrar la raíz de este síntoma que da estos frutos negativos y comenzar a cuidarlo, de forma que no influya más y podamos elegir qué hacer con nuestra vida.

Luego podemos encontrar relación entre este síntoma que descubrimos y lo que vivió nuestra madre en el momento del embarazo, llegaremos así a la semilla de este síntoma que se sembró en la barriga de mamá, germino, creció y dio esos frutos negativos en nuestra vida actual. Desde ese encuentro podremos entender y sanar a nuestra madre, esa semilla automáticamente cambiará información vital para ese síntoma que luego se puso en marcha.

Por último, en este viaje nos encontraremos con nuestros ancestros, veremos y sentiremos todo lo que ellos vivieron. Por fidelidad familiar estamos destinados a hacer lo mimo, ya que si no, no seríamos parte de esa familia que tanto nos esperó para solucionar sus conflictos. Podremos inmediatamente cambiar de semilla, para que lo que se siembre no sean los deseos del árbol, esos frutos negativos que impiden nuestra felicidad, sino que esta vez sembramos nosotros la semilla, la del amor, la comprensión y la sanación para lograr la vida que realmente queremos.

Tu vida cambia en el instante en que entiendes tu vida pasada.

Fuente: Walter Méndez - Decodificación Bioemocional