No perdamos el tiempo negando lo obvio.Es una constante en éstas reflexiones el insistir que el error es un maestro... si sabemos utilizarlo. Y con ésto queremos remarcar que hay personas que en verdad pierden demasiado tiempo valioso de sus vidas negándolos, es como entrar a un salón de clase y hacer caso omiso del maestro que está delante nuestro intentando enseñarnos algo para pasar de grado... si no lo vemos, si no lo escuchamos, si no lo reconocemos como maestro que es, jamás pasaremos de grado, y estaremos repitiendo año a año la misma materia. Será una escuela frustrante y agotadora. Perdemos demasiado tiempo y salud apartando los errores del camino del aprendizaje y adornándolos de mil y una maneras para que parezcan lo que no son.Qué forma más interesante de crecer ésta de ver al error como un maestro, nos quita grandes dolores y decepciones, nos culparemos menos, cargaremos con menos bultos en los hombros si por fin aprendemos lo que ese fallo nuestro nos enseñó.Desde el error más pequeño hasta el más grande enseñan.No implica tanto esfuerzo sentarnos con nosotros mismos y decirnos: "Realmente me equivoqué. No vi esto, ni supuse que podría pasar aquello, ni pensé en las consecuencias sobre tales personas, ni que estropearía tanto tal relación. No me di cuenta que yo mismo saldría tan dañado, no me anticipé a lo que pasaría, no supe frenarme a tiempo, ni imaginé que me enfermaría tanto tal hecho. Arriesgué demasiado... tengo que pensar mejor antes de actuar, de ahora en adelante tengo que evitar tales situaciones, o tengo que aprender a controlar tal aspecto mío, o tengo que esquivar a tales personas, o tengo que medir mejor mis palabras y mis formas, quizás tendría que aprender a ser más cariñoso... ¿por qué me cuesta tanto serlo? Tengo que ahondar en mi, tengo que descubrir causas y razones. Ya me di cuenta de que si sigo practicando tales acciones los resultados serán destructivos para muchos, y yo seré el más perjudicado..."Todo ese tipo de reflexiones y conclusiones son un paso de mejoría asegurado para la calidad de tu vida y de la vida de los que están contigo.A través del error podemos aprender tanto que es una pena perder la oportunidad.Seguir negando errores sólo marca con certeza algo: tu vida seguirá repitiendo el error, seguirás fallando en las mismas cosas, seguirás estropeando relaciones, seguirás dañándote y perjudicándote, seguirás decepcionando a otros, seguirás frustrándote, deprimiéndote, enfermándote, y complicando tu vida y la vida de aquellos que están a tu lado.Tú elijes. El error está ahí. Si lo ves avanzas, si lo niegas retrocedes. Es tu decisión y tu vida... nada más y nada menos.Ps. Patricia Cabrera Sena - www.suconsulta.com |