Para hacer este ejercicio, vamos a ir paso a paso. Tómate tu tiempo:
- Toma papel y boli y describe tu situación económica, ¿cómo es tu situación económica?
- Haz una lista sobre tus creencias sobre el dinero.
- Ahora, haz otra lista sobre todo lo que escuchaste de niño/a sobre el dinero.
- Compara ambas listas, ¿qué te parecen? ¿son similares?
- Ahora compara esas listas con tu situación económica, ¿describen esas listas tu situación económica actual?
Una vez hecho esto, piensa, ¿por qué mi situación económica es así? ¿tal vez tenga algo que ver con mis propias creencias?
Puede que en las listas encontremos cosas como:
“La gente buena no cobra”
“A la gente mala le gusta el dinero”
“Sólo los corruptos tienen dinero”
“El dinero no crece en los árboles”
“Hay que trabajar mucho para tener dinero”
Ahora que tienes tu lista hecha, pregúntate, ¿qué opino sobre estas afirmaciones ahora? ¿me las creo? ¿son verdad para mi ahora?
Seguramente si te pregunto, ¿prefieres tener dinero o no tenerlo?, me contestarías, “¡tener dinero! ¡por supuesto!”. Y si te pregunto si eres buena o mala persona, responderías “¡soy buena persona!”. Entonces, puede que temas que el dinero llegue porque entonces te volverías una mala persona…
A menudo, nos auto-boikoteamos con nuestras propias creencias. El dinero no hace que las personas sean buenas o malas, son nuestras propias creencias las que nos hacen pensar así.
¿Cómo solucionarlo?
Una vez descubiertas tus creencias sobre el dinero, sencillamente haz una nueva lista transformando todas las afirmaciones negativas en positivas. Por ejemplo:
“Soy una buena persona y me encanta el dinero”
“El dinero llega con facilidad”
“Ganar dinero es fácil”
“Me merezco tener dinero”
“Me lo puedo permitir”
“Me encanta tener dinero”
"Elijo tener dinero"
¡Haz tu propia lista de afirmaciones y diviértete haciéndola!
Eva, Zona Positiva |