A veces es más fácil fantasear, idealizar y generar un mundo irreal... que ver, conocer y encarar la realidad misma.
Y es que para muchos no es nada fácil aceptar lo real y recurren a la fantasía, a las ilusiones y al "delirio" para transformar la realidad antes que asumirla.
No busques lo imposible.
Lo ideal es solo una ilusión, algo que alcanzar, un referente cercano a la perfección (que por cierto no existe).
No pierdas tu precioso tiempo esperando lo ideal. Asume lo normal, lo real, lo imperfecto, lo natural, lo que incluye fallas, decepciones y errores.
Un toque de sonrisas que nos enseña algo que tendemos todos a cometer. No idealices. Vive disfrutando aún de lo imperfecto, que siempre tendrá su encanto.
¡No luches con imposibles!
Fuente: Ps. Patricia Cabrera Sena
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